Burbujas con interferencia

O burbujas intermitentes...

Ahora que existe un sitio al que llego y no hay nadie más que YO... es una situación bastante interesante. Debo confesar que los primeros días era extraño e incluso llegan momentos en que es incómodo en el sentido que siempre pensé

"Cuando me salga de mi casa será con una roomie porque no me imagino capaz de vivir sola"

Y no porque tenga miedo a estar yo conmigo misma, sino por cositas como que le tengo miedo a la obscuridad en cierto sentido y me pongo nerviosa... (que podría interpretarse como que a lo mejor siempre sí, me da un poco de miedo ESTAR conmigo misma).

En el hotel, aunque me encontraba yo sola, sabía que al menos había gente a mi alrededor y dentro de todo seguía sintiendo que iba de paso. Tener una casa donde llegar, aunque sea de trabajo, se siente diferente... es tener un espacio, es "ir sentando cabeza", es ir haciéndose grande...cosa que aún sigue siendo un dilema para mí

Aunque, llega el momento en el que llego a mi casa con toda la familia (osea el DF) y de nuevo me incorporo a la rutina en la que Marce ES, casi como un mandato: la hija/la desordenada/OaOa/ la cervecera/la enojona/la histérica/la que en-cuanto-puede-se-sale-de-su-casa. Agregando los gritos, los mandoneos, los abrazos, los chiqueos entre todos y para mí... que de cierta forma se convierten en parte de la interferencia de lo que ahora estoy intentando definir

¿Quién es Marce? qué, dentro de toda esa vorágine de algunas cosas YA determinadas, algunas cosas INVENTADAS por mí, y otras tantas QUERIDAS por mí soy yo. Qué de todo eso debe continuar y qué tanto de eso ya no me sirve.

Un ejercicio no tanto de reflexión como si fuera parte de una lista de cosas que me puedo quitar y poner como un sombrero, pero más un ejercicio de ir SINTIENDO la comodidad de mi PROPIA PIEL.